QUEREMOS VER GORDOS DIGNOS EN LAS SERIES DE TELEVISIÓN
Hoy he visto en las noticias de Yahoo un artículo que decía que "los gays apuntalan las series españolas". Y es que no hay ni una que no tenga su marica en nómina. Pero algo ha cambiado: antes, los homosexuales salían para dar la nota cómica en una teleserie. ¡Alto! Antes de que me colguéis por homófobo, recordad que soy fat, y a los gordos siempre (incluso ahora) nos han hecho asumir el rol de hazmerreir. Si ha de haber respeto, que sea para ambos colectivos.
Una amiga mía, al oirme hacer escarnio, mofa y befa de los mariquitas, me dijo ofendida: "¡Eh, que yo tengo amigos gays!". Jamás le oí articular esa misma defensa si alguien se burlaba de un mantecas.
Claro, hoy es políticamente correcto articular furibundas defensas en favor de los homosexuales, pero jamás se ha protegido a los obesos de las continuas burlas mediáticas. ¡Basta ya! ¡Joer ya!
Los gordos queremos salir en la tele, y tener nuestra cuota de pantalla, al menos la mitad de la que ya tienen los gays (ello supondría un abultado 25% para nosotros, los fatitos). ¿Es que acaso es mejor Jesús Vázquez que Cristina Almeida? Hombre, que ella tiene estudios...
No hay excusa: ahora las teles suelen hacerse con formato panorámico, así que con suerte pueden salir incluso dos gordos a la vez en la pantalla. Así podremos ver cosas como el hermano gordo de "House", un farmaceútico ligón llamado Jardín. O personajes como Ofelia, la profe obesa de Latín que se cae encima de 15 de los personajes adolescentes de "Física o química" y los mata.
En el cine ya tenemos a Gerard Depardieu y a Jabba el Hutt. Queremos gordos dignos en la tele...¡pero ya!